sábado, 3 de marzo de 2012

Receta de grissini (Falsos restaurantes italianos de Zaragoza)


Grissini a los cuatro palos de la baraja: pimentón, raas al hanout, curry picante y semillas
Dedicada a los restaurantes italianos de Zaragoza


La receta de hoy va a pelo. Surge de la añoranza hacia Italia que le entra a uno cada vez que acude, ingenuo, a un restaurante de los autodenominados italianos en nuestra Zaragoza City. Y es que parece que en la península vecina no haya nada más que pasta y pizza y que en todos sus rincones la gente coma lo mismo. No es necesario haber viajado mucho por la bota para comprender que no es así. Multitud de recetas ancestrales se descubren en cada rincón. El tratamiento de las verduras es magistral, por no hablar de sus sopas y potajes de cuchara. Frituras crujientes, carpaccios de una diversidad que asusta y unos postres imaginativos y lechosos como sólo ellos lo son. Recordando su gastronomía uno acude al restaurante italiano cargado de optimismo, ve la carta, husmea en los platos de los comensales de alrededor y recuerda de repente en qué ciudad se encuentra.

Montañas de alegres grissinis que echamos de menos
en nuestros supuestos restaurantes italianos
Si traigo aquí esta receta es para recordar al experimentado y mostrar al novel una costumbre italiana de la que debemos tomar nota, y más en un tiempo en los que muchos de nuestros restaurantes comienzan a cobrar a los clientes el pan, que además suele ser de calidad ínfima. Algo ridículo e inimaginable hace unos años se está generalizando. Rebelémonos. No acudamos a esos antros hasta que reconozcan su error y lo enmienden. Copiemos a nuestros hermanos en la latinidad y llenemos nuestras mesas de manteles de cuadros y de cestos repletos de todo tipo de grissini. Para abrir boca, para acompañar el primer vino (digo vino, que no lambrusco, totalmente desconocido en la Italia digna), como acompañamiento de la comida o para rellenar el posible hueco final, pero eso sí siempre crujientes y gratuitos. Como debe de ser. Aprendan restaurantes mañoitalianos, tomen nota y se verán recompensados por nuestra fidelidad. Que el mundo es un pañuelo y ya no pueden engañarnos. Ya basta de patochadas, por favor…

Ingredientes sencillos y económicos

Receta de grissini

Ingredientes:

700 gramos de harina de fuerza de trigo
400 cl de agua tibia
Seis cucharadas de Aceite de Oliva Virgen Extra
Tres cucharaditas de sal en escamas
Tres cucharaditas de levadura de panadería
Cuatro cucharaditas de semillas de sésamo (o ajonjolí)
Una cucharadita de pimentón dulce de la Vera
Una cucharadita de Raas al Hanout
Una cucharadita de Curry picante
Una cucharadita de semillas al gusto (anís, comino…)
Aceite para pintar los grissini

Elaboración:

Se advierte que vamos a trabajar una masa común para todas las variedades de grissini y tras un primer levado introduciremos en cada una de las cuatro partes en las que la dividiremos el ingrediente correspondiente que le de personalidad. Para ello en un bowl grande introduciremos todos los ingredientes secos (harina, levadura sal y sésamo), y sobre el verteremos el aceite y el agua. Amasaremos en el recipiente hasta que domemos la masa. Entonces la pasaremos a una superficie limpia y enharinada para continuar trabajándola durante diez minutos. Formaremos una bola y la dejaremos levar durante, al menos, media hora o hasta que duplique su tamaño.

Elementos secos

Fácil amasado

Y a levar se ha dicho

 El siguiente paso consiste en dividir la bola de masa en cuatro partes iguales, incorporar en una el pimentón, en otra el raas al hanout, en la tercera el curry y en la última las semillas. Trabajaremos dos minutos por separado cada una y volveremos a dejarlas reposar otro cuarto de hora.

Estiraremos con rodillo y ayudándonos de papel de horno, para que quede bien homogéneo y no se pegue a la encimera o al rodillo, hasta dejarla de un grosor de cuatro o cinco milímetros.
Cortaremos tiras alargadas y estrechas y las presentaremos en forma de rulo, planas o cilíndricas (en la variedad está el gusto).

División

Agregaremos el palo elegido para cada uno

Vuelta a amasar

Trabajo de rodillo
Con el horno precalentado a 190 grados las introduciremos tras pintarla con aceite de oliva para que saquen brillo durante el horneado. Diez minutos por cada lado será suficientes. Se deben dejar enfriar unos minutos en la propia bandeja antes de pasarlos a una rejilla donde se terminarán de enfriar.

Cuatro palos de la baraja

Al pimentón de la Vera enrrolladitos

A las semillas de comino y anises aplanados

Al Raas al Hanout y tomillo doblados

Y al Curry picante con sésamo en bastoncitos

3 comentarios:

Comedieta dijo...

¡Me encanta esta receta tan sencilla!. Le doy vueltas a lo del pan y no me atrevo: -¡Manolete, si no sabes, para que te metes"- habiendo panaderías tan ricas cerca, para una vez que como pan, ponerme a experimentar me da respeto. Pero lo de los grissines lo veo factible, a mi nivel subcero. Y, además, es que me vuelven locaaaaaaa!. No suelo ir a restaurantes italianos desde hace... así que no tengo opinión sobre si italianidad o no, pero creo en cada una de las palabras de tu entrada.

José Luis Pueyo dijo...

David, te esperamos en la tercera blogquedada. Cuando puedas, ya me enviarás tu email. Un cordial saludo. JL Pueyo

Camila dijo...

Gracias por estos datos. La verdad que aunque la mayoría seamos italianos, muchos perdimos la receta de la nonna entre idas y vueltas y es una lástima que después vayamos a algún lugar a comer nuestra comida y nos sepa distinto solo porque el que la hace es español! De los mejores restaurantes italianos que conozco, en Trattoria te hacen los panes como se debe. La llevé a mi abuela y los probó, y me dijo que ésos sí estaban bien hechos!